sábado, 30 de abril de 2011

   Y te invitaré a recordar los buenos momentos que ahora estamos viviendo, porque sé que merecerá la pena, porque renacerá en nuestro interior ese sentimiento que no pudimos mostrar por miedo a lo que dijeran, a lo que pensaran de nosotros. Volveremos a reír juntos, y a picarnos como de costumbre, volveremos a ser tan imbéciles como lo somos ahora. 
   
Porque quisiera ver cómo seremos más adelante, la vida que llevaremos cada uno, ¿nos volveremos a cruzar? ¿no nos separaremos nunca? Son muchas las preguntas que tengo sobre nosotros, y no las doy a conocer, porque no estoy segura de si lo que siento por ti, es verdaderamente amor.


sábado, 23 de abril de 2011

Aún no lo sabes, pero me encantas.

¿Y a quién no le gustaría que sus sueños se hicieran realidad? Sí, sería genial. Tener al chico que te gusta, super-amigas que te sigan a todas partes y estén presentes siempre que te plazca, ir a donde quieras, sin padres que te lo impidan, salir hasta la hora que te dé la gana, divertirte, y sobre todo, ser feliz.


Por desgracia, la vida tiene sus obstáculos, y no es fácil saltarles. Las cosas se complican llegado un determinado instante; a partir de ahí, te dan ganas de desahogarte con la primera persona que veas, de gritar, llorar y desaparecer de una vez por todas, pero fíjate, que es pensar en él, y mi mundo sonríe, y me olvido de todo. Aunque no me quiera, aunque me ignore, aunque piense que soy un pequeño monstruito, le quiero, y por mucho que se aleje de mí, nunca le olvidaré.


Te quiero, imbécil.

viernes, 22 de abril de 2011

La pura realidad.

+¿Por qué dices que estás obsesionada?
- Porque no puedo dejar de pensar en él ni un puto segundo.
+ Eso no es obsesión.
- ¿Ah, no? ¿Entonces qué es, listo?
+ Amor.



Eso, es amor.

 Siento esa impotencia que en ocasiones se hace agresiva, o se expresa por lágrimas. También esa que a veces te hace cometer locuras porque no hay nada como ver todo lo que ocurre y saber que no puedes hacer nada al respecto, que ya casi sin fuerzas te das cuenta que una vez te prometiste no volver a sentirte así por nadie, y hoy nuevamente vuelves a sentirte así. Necesito verte, necesito abrazarte y olvidar las veces que vi cómo esas muestras de cariño no eran a mí, ni si quiera estoy segura de qué se supone que es lo que me produce tristeza y esa angustia que a veces es preocupante. No sé, puede que tal vez las personas le hallan dado el nombre de amor, o tal vez no.



Y siempre igual, siempre así.

El tiempo funciona sin pilas. Los trenes no esperan y se largan. Los capuchones de los bolis se pierden. Las palabras son inversamente proporcionales a todo lo que queremos decir. La bateria de los móviles siempre falla. Las drogas son un medio de vida. La música pierde interés por sus letras. Los ordenadores tienen un chip para no querer volver a encenderse cada dos años. Los zapatos se desgastan. Los perros ladran porque sí. Y los gatos son muy perros. Los tipos malos son muy malos y 
los tipos buenos no son tan buenos.



jueves, 21 de abril de 2011

+ No juegues, que si no estamos todo el día metidos entre estas cuatro paredes.

- Suena tentador, ¿sabes? Creo que si traemos la nevera a la habitación se convertiría en el paraíso perfecto. ¿Qué dices?

 + Digo que me encantas, que me tienes loca, que te amo, que te deseo, que quiero estar contigo día y noche, quiero que cuando salga el sol estés entre mis brazos y que cuando se ponga te tenga bajo mi protección. Quiero vivirlo todo contigo. Digo que hasta un puto planeta en medio de la nada sería mi paraíso si tú estuvieras conmigo.



http://www.youtube.com/watch?v=otx0Bnru0dY

miércoles, 20 de abril de 2011

(♥)

¿Quién no ha pensado alguna vez: qué será de mí sin él/ella? Bien, pues eso es exactamente lo que me pasa a mí. Resulta que he descubierto que él no era una obsesión, era una necesidad. Sí, le necesito, y aunque no lo sepa, sé que llegará a darse cuenta de algún modo.


Esa sensación de querer y no poder, esas ganas de decirle a la cara que es tu mundo, esa rabia que va creciendo y a la vez desea salir afuera.. todo eso es lo que siento yo.


¿Y qué hago en estos casos?, ¿le digo que no puedo vivir sin él?, ¿qué dirá?
Creerá que estoy loca, se apartará de mí, lo más seguro. Casualmente, por eso, me voy a callar la boca, haré como que es una persona más, y nada. Entonces, me arrepentiré de lo que no hice en su momento, y lloraré, sí, ¿por un chico? ¡Qué estupidez! Aún así, es genial, le quiero.